Eleva el poder de autocuración de nuestro cuerpo

Al aplicar Reiki a nosotros mismos o a una persona estamos subiendo su frecuencia media a la vez que la equilibramos, mejoramos la circulación y deshacemos los bloqueos de energía, restableciendo la salud. El Reiki equilibra nuestro sistema energético bajando los niveles de estrés del cuerpo y así se alcanza un nivel óptimo de vibración en el que se activan los mecanismos de autosanación del mismo.